El planeta Krypton está desestabilizado por la explotación de su núcleo. Jor-El, asesor principal del consejo supremo de Krypton, recomienda que se le dé el control del códice genético. Antes de que se pueda tomar ninguna medida, los soldados dirigidos por el general Zod, un viejo amigo de Jor-El, inician un levantamiento y arrestan a los consejeros. Al darse cuenta de que Krypton está condenado, Jor-El roba el códice genético buscado por Zod y lo infunde en el ADN de su hijo, Kal-El, el primer niño kryptoniano nacido de forma natural en siglos. Zod mata a Jor-El, que se sacrifica para permitir que su hijo escape en una nave espacial preprogramada después de que su esposa Lara Lor-Van la lance. El consejo sofoca la rebelión de Zod y los rebeldes son condenados al exilio en la Zona Fantasma tras ser declarados culpables de traición. Krypton explota poco después.